De Ocentejo al Hundido de Armallones

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En el interior del cañón


1ª Geo Ruta: de Ocentejo al Hundido de Armallones


Si hay algo que caracteriza la geología del Parque Natural del Alto Tajo, es su diversidad, que lo convierte en un punto atractivo para el visitante. En este espacio natural de la provincia se puede encontrar una increíble variedad de elementos geológicos, como rocas con más de 400 millones de años de antigüedad junto a otras en proceso de formación hoy en día, rocas sedimentarias, metamórficas e ígneas, varios tipos de minerales, espectaculares pliegues y fallas, y abundantes fósiles de organismos que habitaron esta zona hace millones de años.

El primero de los nueve itinerarios diseñados para conocer la geología de este espacio natural, es un recorrido que se adentra en el cañón del río Tajo, partiendo desde Ocentejo y llegando hasta el ‘Hundido de Armallones’, uno de los enclaves más espectaculares del Parque Natural, donde se pone de manifiesto el poder erosivo del río, que ha labrado un profundo cañón de paredes verticales en las que anidan numerosas aves rupícolas.

En este agradable paseo que puede durar unas dos o tres horas, los visitantes tienen la opción de utilizar la bicicleta o bien caminar los ocho kilómetros que hay de ida y vuelta. La recomendación que se le hace al visitante es que aparque su vehículo en el pueblo de Ocentejo, ya que la pista se encuentra en mal estado y así se evitan molestias a la avifauna.

El cañón, cuyo desprendimiento y formación tuvieron lugar hace aproximadamente 1,8 millones de años, es el gran testigo de cómo el Tajo ha labrado un impresionante cañón fluvial que deja al descubierto la disposición de las rocas que forman las paredes del mismo.

Desde este lugar, donde se sitúa la barrera que impide el acceso de los vehículos a motor, inicia un camino descendente que traza una marcada curva a la izquierda, donde el visitante podrá detenerse a observar el cañón. Es aquí, en este privilegiado mirador, donde son visibles los diferentes elementos que forman el cañón. Uno de los rasgos más significativos es el espectacular pliegue visible en el extremo derecho del cañón, que demuestra la intensidad del plegamiento en estas rocas, que tuvo lugar durante la Orogenia Alpina.

En un camino amenizado por los paneles explicativos que además recuerdan las normas a seguir dentro del parque –no hacer fuego, no tirar basura y respetar la flora, fauna y recursos geológicos–, el visitante seguirá adelante su paseo, hasta llegar al “Hundido”. A partir de un impresionante desprendimiento rocoso, este lugar pasó a denominarse desde entonces con el nombre de ‘Hundido de Armallones’. Aunque en el escarpe no es fácil distinguir el lugar original de donde proceden los bloques de roca, con sus dimensiones el visitante sí que podrá hacerse a la idea de la magnitud de este proceso, que llegó a represar totalmente el río.

Una cascada de piedra

Este recorrido esconde numerosas curiosidades que hacen más atractiva la visita del turista. Entre los tesoros, una de las zonas dignas de observar son ‘Los cuchillares’, consistentes en capas o estratos de roca calcárea que presentan en este lugar una disposición casi vertical, debido al plegamiento que sufrieron mucho después de su formación. Los procesos erosivos han actuado sobre ellos, dando lugar a estos escarpes de perfil aserrado.

La ‘Cascada de piedra’ es otro de los altos que hay que hacer en el camino para detenerse a observarla y disfrutar relajadamente del paisaje. Una surgencia situada en el escarpe da lugar a que el agua escurra ladera abajo. En su recorrido, el agua libera parte del carbonato contenido en ella, dando lugar a la formación de una toba. Cada vez que de la surgencia vuelve a manar agua, precipita más carbonato, por lo que la toba “crece” con la forma de la cascada. Además éste es un bonito ejemplo de un proceso visible a gran escala en otros lugares del Parque Natural.

El tercer alto se sitúa ya casi al final del recorrido, cuando la pista alcanza el nivel del río, en una pared rocosa situada a la izquierda. En ese lugar se muestran, a pequeña escala, los procesos de plegamiento que han afectado al conjunto de las rocas calcáreas que forman las paredes del cañón.

Cómo llegar
Por la autovía de Aragón (N-II), nos desviaremos en el km. 103 y tomaremos la N-204 en dirección a Cifuentes, donde cambiaremos a la CM-2021 en dirección a Canredondo. Seguiremos hasta el desvío de Sacecorbo y a 12,5 km. estaremos en nuestro destino, Ocentejo.

Dónde comer
Aunque la oferta para comer en Ocentejo no es muy amplia, seguro que el visitante quedará satisfecho con la visita al restaurante ‘Alegre’, donde podrá reponer energías después de un día de campo.

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